viernes, 30 de noviembre de 2012

Bibliografía


Turning concern into action: Energy effi ciency and the European consumer. Logica, 2008.

Household consumption and the environment. EEA, 2005.

Towards sustainable household consumption? Trends and policies in OECD countries
. OECD, 2002.

http://www.dolceta.eu/espana/Mod4/IMG/pdf/spanish_teachers_kit.pdf

http://www.biodegradable.com.mx/que_es_reciclar.html

http://www.slideshare.net/manuelmch/cambio-climtico-y-consumo-responsable

http://www.facua.org/es/informe.php?Id=19

Para saber mas







Conclusiónes

El consumo desmedido e irracional de las sociedades modernas, generado por patrones insustentables de conducta, conlleva el uso también desmedido e irracional de recursos naturales, produciendo daños ambientales como lo son la escasez o el desgaste de los recursos disponibles.
Consideramos que es fundamental llevar a cabo una orientación de prácticas de consumo dirigidas a la sustentabilidad.
“Todos podemos ser parte del movimiento sustentable, el primer requisito: Una nueva mentalidad, luego una sensibilidad especial y siempre tener la disposición de transmitir una actitud positiva” - Leticia Salaz

 Durante este semestre abordamos diversos temas sobre el desarrollo sustentable, el cual nos fue de mucha ayuda para hacer conciencia sobre los cambios graduales que esta teniendo el planeta y de que manera nos esta afectando , así también para saber como contribuir para mejorarlo y preservarlo para el futuro.

En cuanto a implementar el desarrollo de los temas en este blog nos pareció muy interesante y novedoso, asi como esto sera de mucha ayuda a otros estudiantes como medio de consulta.



Jeanine Pérez Arrocha
 Rubén Pinzón, Cristel 
Rodríguez Dantorie
Gabriela Pérez Vásquez 
 Gloria Peraza Castro

jueves, 29 de noviembre de 2012

Políticas gubernamentales sustentables en México y consumismo


Desde 2006 México cuenta con un programa voluntario de contabilidad y reporte de emisiones de Gases de Efecto Invernadero en el que actualmente participan 110 empresas públicas y privadas. El último reporte da cuenta de emisiones por 150 millones de toneladas de CO2 e, que representan el 21% de las emisiones por quema de combustibles y el 30% de las emisiones por generación y uso de energía.
La obligación de México al amparo de los instrumentos internacionales sobre cambio climático es la presentación de Comunicaciones Nacionales; México es el único país en desarrollo que ha presentado cuatro comunicaciones nacionales en las que reporta inventarios de emisiones y planes de acción contra el cambio climático.
Con hechos, México sostiene la postura de que todos los países deben y pueden contribuir en la medida de sus posibilidades a enfrentar la problemática derivada del cambio climático global.
Inventarios Nacionales de Gases de Efecto Invernadero 1990-2006  
La elaboración de los Inventarios Nacionales de Gases de Efecto Invernadero es una tarea realizada por México para cumplir con sus obligaciones bajo la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC). El inventario incluye las emisiones antropogénicas por fuente y sumidero de todos los gases de efecto invernadero y se elabora usando metodologías de comparación aceptadas y promovidas por la Conferencia de las Partes de la CMNUCC. La última actualización del Inventario de Gases de Efecto Invernadero se incluyó en el 2006 en la Cuarta Comunicación Nacional para la CMNUCC.
Energía
En el 2006, las emisiones totales de energía fue de 382.7 Millones de Toneladas métricas (MTM) en CO2eq. únicamente del consumo de combustibles fósiles. El sector de transporte contribuyó con el 34%, la generación de energía eléctrica con 26% y las industrias de construcción y manufactura con 13%.
Programa Especial de Cambio Climático (PECC)

Las acciones concretas que México ha emprendido para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero permitirán que en 2012 nuestro país logre, tan solo en ese año, la mitigación de 51 millones de toneladas de CO2 o su equivalente. Alcanzar esta meta equivale a sacar de la circulación a todo el parque vehicular del Distrito Federal por cuatro años y medio o a almacenar carbono en un área de bosques de 1700 km2 (el tamaño del Distrito Federal). No es una meta imposible. De hecho, en abril de 2010 alcanzamos una reducción anual del orden de las 20.5 millones de toneladas de CO2 o su equivalente.

 Reconversión Energética

El Gobierno Federal realiza un proceso de reconversión energética. En 2012 el 26% de la electricidad provendrá de fuentes renovables. La creación de un fondo nacional de mil millones de pesos contribuirá a esta transición durante los próximos tres años.

Se han identificado 42 proyectos para el mercado de metano. Este gas tiene un potencial de calentamiento veintiún veces mayor que el CO2. Con la ejecución de estos proyectos México busca reducir cada año 12 millones de toneladas de CO2 o su equivalente. Otros 13 proyectos aprovecharán el biogás que generan los rellenos sanitarios, los residuos agropecuarios y las minas de carbón, con la intención de reducir alrededor de dos millones de toneladas de CO2 o su equivalente por año.

Existen dos proyectos de petróleo y gas en el Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kyoto que buscan reducir aproximadamente 7.5 millones de toneladas de CO2 o su equivalente.

El gobierno mexicano instrumenta otras acciones con beneficio ambiental como la sustitución de aparatos electrodomésticos antiguos por nuevos y más amigables con el medio ambiente. Alrededor de 537 mil equipos, entre refrigeradores y aires acondicionados, han sido recogidos al 2010 y su sustitución financiada por el Gobierno Federal en beneficio de las familias de escasos recursos.

La meta para el 2012 contemplada dentro del Programa Especial de Cambio Climático prevé la sustitución de casi 2 millones de refrigeradores y equipos de aire acondicionado, así como el reemplazo de poco más de 47 millones de focos incandescentes por lámparas fluorescentes compactas u otras de mayor eficiencia. Con estas medidas, México dejaría de emitir alrededor de 4.73 MtCO2e y estaría ahorrando cerca de 7,871 GWh de energía eléctrica entre 2009 y 2012.

Adaptación al Cambio Climático


En materia de adaptación, México ya está impulsando con mucho énfasis la estrategia central que plantea el Convenio Marco sobre Servicios Climáticos, que consiste en la generación de productos específicos para que cada sector, económico y social, tenga los elementos técnicos necesarios para adaptarse a las consecuencias del cambio climático con el menor impacto negativo y de la manera más ventajosa posible.

Para México es muy importante pensar globalmente y actuar localmente. Por eso la administración actual asesora a las entidades federativas para que elaboren sus propios programas estatales de acción ante el cambio climático.

La respuesta de los gobiernos estatales ha sido muy positiva: Veracruz, el Distrito Federal y Nuevo León cuentan ya con sus programas de acción. Otros estados se hallan actualmente elaborando sus proyectos que serán presentados a la opinión pública en breve, y el resto ya cuenta con la metodología de trabajo para desarrollarlos.

Impulso a la eficiencia y tecnologías limpias para la generación de energía


 Para reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y combatir los efectos del cambio climático en el mediano y largo plazos, el Gobierno Federal ha puesto en práctica acciones orientadas a fomentar el uso de las energías renovables, disminuir la dependencia de los combustibles fósiles, y generar ahorros y un óptimo aprovechamiento de la energía para el país.
Petróleos Mexicanos (PEMEX) ha instrumentado proyectos de eficiencia energética, cogeneración, reducción de emisiones de metano, recuperación mejorada con bióxido de carbono y disminución de la quema de gas.
pleca1Estos proyectos se encuentran en diferentes etapas del proceso de gestión de proyectos considerados Mecanismo para un Desarrollo Limpio (MDL) ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con la intención de ser presentados como actividad de proyecto en el marco del MDL.
pleca1En materia de certificaciones en industria limpia, desde el inicio del Programa Nacional de Auditoría Ambiental al cierre del primer semestre de 2010, PEMEX ha inscrito 805 instalaciones.
pleca1La Comisión Federal de Electricidad (CFE) elaboró desde 2007 un portafolio de 27 proyectos viables bajo el esquema de MDL, con una contribución estimada de 6.5 millones de toneladas evitadas de bióxido de carbono durante la actual administración.
 pleca1En referencia a los proyectos que CFE tiene en proceso de autorización dentro del esquema MDL, de septiembre de 2009 a junio de 2010 se realizaron, entre otras, las siguientes acciones:
pleca2Se adjudicaron los proyectos Humeros II Fase A y Cerro Prieto V, que permitirán evitar, respectivamente, 56 mil y 180 mil toneladas de bióxido de carbono equivalente por año, a partir de 2011.
pleca2CFE gestiona con el BID un convenio que le permitirá comercializar libremente los certificados de reducción de emisiones asociados a la operación de la Central Hidroeléctrica La Yesca.
pleca2Durante 2009, la gestión de CFE ante la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático (CICC) permitió obtener las Cartas de No Objeción para proyectos de repotenciación de diez centrales hidroeléctricas.
pleca2Con la operación de la Central Eólica La Venta II, durante 2009 se obtuvo una reducción aproximada de 150 mil toneladas de bióxido de carbono equivalente, mientras en el periodo enero-junio de 2010 se estima en 65 mil toneladas adicionales.
pleca2Los proyectos eólicos Oaxaca II, III y IV , así como La Venta III, que se desarrollan bajo el concepto de Productores Independientes de Energía, representan una emisión evitada de 680 mil toneladas de bióxido de carbono equivalente por año. La entrada en operación de los tres primeros está programada para 2012, y en el caso de La Venta III para 2011.
pleca2El proyecto para la producción de vapor con energía solar para la Central Termoeléctrica Puerto Libertad, actualmente cuenta con Carta de No Objeción. Las emisiones evitadas de bióxido de carbono equivalente son aproximadamente de 112 mil toneladas y se estima que entre en operación en el 2012.
pleca2Al mes de junio de 2010, CFE contó con 405 instalaciones certificadas por la PROFEPA, dentro de las cuales 71 fueron certificadas como Industria Limpia entre septiembre de 2009 y junio de 2010, pertenecientes a las áreas de Distribución y Transmisión.
 Promoción al uso eficiente de energía en el ámbito doméstico, industrial, agrícola y de transporte
Programa de Eficiencia Energética
Sus acciones comprenden medidas de ahorro de energía térmica en las instalaciones industriales, así como el Programa de Ahorro de Energía Eléctrica, que registraba ahorros de ésta en los inmuebles de más de mil metros cuadrados, ambos en la Administración Pública Federal (APF), el Gobierno Federal, a través de la CONUEE, lleva a cabo de manera anual el Protocolo de Actividades para la Implementación de Acciones de Eficiencia Energética en Inmuebles, Flotas Vehiculares e Instalaciones de la Administración Pública Federal.
De enero a junio de 2010 estas acciones implementadas permitieron alcanzar un potencial de ahorro por 2.67 millones de barriles de petróleo crudo equivalente para el caso de las instalaciones industriales, mientras para los inmuebles el ahorro eléctrico fue de 119 millones de kilowatts-hora.
De enero 2007 a junio 2010, las medidas de ahorro de energía térmica en instalaciones industriales han sumado 9.62 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
Desarrollo de vivienda sustentable
Una de las situaciones que ocupa al Gobierno Federal, es que las nuevas viviendas a construirse propicien la convivencia y eleven la calidad de vida. En 2009 se firmó el Pacto Nacional por la Vivienda para Vivir Mejor.
Entre septiembre 2009 y junio 2010, el INFONAVIT ha otorgado más de 176 mil créditos con Hipoteca Verde, lo que ha permitido al derechohabiente comprar viviendas ecológicas y generar ahorros en su gasto familiar. El uso de ecotecnologías disminuye los consumos de energía eléctrica, agua y gas, y contribuye al uso eficiente de los recursos naturales. Se estima que cada vivienda de interés social equipada con paquete de ecotecnologías, reduce su consumo energético anual en un rango que oscila entre una y 1.5 toneladas de bióxido de carbono.
Desarrollo de ciudades rurales sustentables
Con el propósito de promover el desarrollo regional y el combate al binomio dispersión-marginación, se ha impulsado el Programa de Ciudades Rurales Sustentables, como una estrategia de política pública.
Esta estrategia, tiene como objetivo incidir en el desarrollo regional y el ordenamiento territorial para enfrentar los problemas de marginación, pobreza, dispersión poblacional, así como atender a la población afectada por fenómenos climáticos, y dotarlas de servicios de calidad, equipamiento, oportunidades económicas y de desarrollo social y humano.
En septiembre de 2009, se realizó la entrega de la primera ciudad rural sustentable denominada Nuevo Juan de Grijalva, en el municipio de Ostuacán, Chiapas, que incluye 410 viviendas para los damnificados afectados por las lluvias atípicas y deslaves, a quienes se les brindó de esta manera una solución integral en materia habitacional.
Nuevo Juan de Grijalva se construyó con recursos del Gobierno Federal, estatal y del municipio afectado, así como del sector privado. El Gobierno Federal aportó 33.3 millones de pesos; el gobierno estatal aportó 50 hectáreas de reserva territorial con vocación habitacional y de desarrollo urbano, con servicios básicos, así como 30 hectáreas para la zona productiva agroindustrial; y fundaciones privadas aportaron 19.5 millones de pesos.

Consumismo y cambio climático


Nuestro consumo también afecta al clima

La importancia que tiene el cambio climático como problema ambiental global es un hecho que la mayor parte de los ciudadanos ya reconoce. Y también se reconoce la necesidad de una acción urgente para mitigar sus efectos. Un reciente informe europeo sobre la actitud de los ciudadanos europeos ante la eficiencia energética y el cambio climático muestra que un 80% de los europeos se manifiesta muy preocupado por el cambio climático, llegando este porcentaje hasta un 94% en España). Pero por otro lado, y a pesar de las políticas de consumo sostenible que se están desarrollando desde la Cumbre de Río del 92, el impacto ambiental y climático que tiene el sector doméstico en Europa sigue creciendo.
Según la Agencia Europea del Medio Ambiente (EEA), el consumo doméstico de los ciudadanos
europeos representa una de las mayores presiones ambientales no sólo en Europa sino también fuera de sus fronteras y además el impacto está creciendo al menos desde 1990. Esta creciente presión se explica no sólo por el crecimiento económico, sino por factores sociales y demográficos. Por citar el más relevante,la ocupación media de las viviendas en Europa está disminuyendo, lo que significa cada vez más viviendas y electrodomésticos para el mismo número de personas. Por otra parte, aunque la eficiencia energética de los electrodomésticos cada vez es mayor, el consumo energético de las viviendas no disminuye. La razón es que ha aumentado mucho el número de electrodomésticos y aparatos que usamos habitualmente, y además su vida media es muy corta debido a los rápidos cambios de moda y tecnológicos.
Pero los consumidores tenemos un doble papel en la mitigación del cambio climático
Según trabajos de la propia Agencia Europea del Medio Ambiente o de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), las políticas más efectivas para reducir el impacto ambiental del sector doméstico consisten en una combinación de medidas legales, de mercado, informativas y educativas.
Y en este marco, el papel del ciudadano como consumidor es fundamental por varias razones.
En primer lugar porque, a la hora de comprar un producto o servicio, tiene en su mano la capacidad de escoger, de entre todas las alternativas, aquella opción más respetuosa con el clima. Si además tenemos en cuenta que muchos productos generan un mayor impacto durante su uso que durante la fabricación se revela que los hábitos de uso de los consumidores son también clave en la prevención del cambio climático.
Pero sobre todo, los consumidores representan una palanca clave para modificar la actuación de las empresas. Frente a medidas legislativas y a la presión de las organizaciones sociales, la demanda de los consumidores se ha mostrado como uno de los mecanismos más rápidos para hacer cambiar a las
empresas y al diseño de sus productos y servicios. Efectivamente, si el consumidor discrimina a la hora de hacer sus compras, favoreciendo a las empresas que más responsabilidad muestran hacia el cambio climático, el mercado está mandando una señal que puede tener un efecto mucho más rápido y más profundo que muchas medidas legislativas.


Consumo Responsable Cambio Climático


Consumismo, salud y sustentabilidad


CONSUMISMO
Las consecuencias sociales y ambientales del consumismo están a la vista de quien las quiera ver. Crecientes desigualdades sociales, sobreexplotación de la naturaleza y generación insostenible de residuos. Desde nuestro lugar, tenemos la obligación ética y moral de convertirnos en consumidores responsables y fomentar un consumo responsable.
El modelo industrial-consumista ha conducido a que las economías de los países mas pobres dediquen gran parte de sus recursos, humanos y naturales, a la satisfacción del enorme consumo de las sociedades más industrializadas, incluso dejando de satisfacer las necesidades fundamentales de sus propias poblaciones.
La sociedad de consumo es a todas luces ambientalmente insostenible, ya ni siquiera puede sostenerse sobre la desigualdad entre norte y sur, que hizo duramente muchos años las veces de compensadora de la presión sobre los recursos naturales que ejerce el consumo excesivo de los países mas ricos. Este consumo implica un aumento constante de la extracción de recursos naturales, que se están agotando, y del consiguiente vertido de residuos que ha colmado ya hace años la capacidad de absorción del planeta.
      

SALUD
El estilo de vida, o sea el tipo de hábitos y costumbres que posee una persona, puede ser beneficioso para la salud, pero también puede llegar a dañarla o a influir de modo negativo sobre ella. Por ejemplo, un individuo que mantiene una alimentación equilibrada y que realiza actividades físicas en forma cotidiana tiene mayores probabilidades de gozar de buena salud. Por el contrario, una persona que come y bebe en exceso, que descansa mal y que fuma, corre serios riesgos de sufrir enfermedades evitables.

El agua contaminada es responsable de muchas enfermedades. En esta se encuentran bacterias que enferman a los seres que la utilizan. Entre estas enfermedades se encuentran la amebiasis, disentería bacilar, enteritis campilobacteriana, giardiasis, fiebre tifoidea, salmonelosis, filariasis, leptospirosis, tularemia, tracoma, esquistosomiasis y malaria. Muchas de estas enfermedades causan daños a los intestinos, la piel y los ojos.
La contaminación ha alcanzado un gran nivel en muchos países del mundo. La contaminación puede ser de cualquier tipo. En este trabajo, hemos mencionado la contaminación del agua, del aire, por ruido y del suelo.
Todas estas clases de contaminación afecta diferentes órganos de nuestro cuerpo. Al parecer, cada contaminación afecta un sistema, del cuerpo humano, diferente. Si no evitamos o al menos reducimos la contaminación en nuestro planeta, muchas personas morirán a causa de problemas en sus órganos como ya está sucediendo actualmente.
Debemos hacer algo para que las futuras generaciones puedan tener una vida sana sin contaminación que dañe los órganos de sus cuerpos.


SUSTENTABILIDAD
La Sustentabilidad es un proceso - no un estado - que hace referencia a una forma de desarrollo en la que se busca el bienestar humano sin dañar el equilibrio del ambiente y sus recursos naturales, ya que estos, son la base de todas las formas de vida.
Bajo un modelo de Desarrollo Sustentable, las actividades humanas impactan el ambiente y emplean los recursos naturales de manera tal que no se sobrepase la capacidad de la naturaleza de absorber los contaminantes que se emiten y de regenerarse a sí misma. Los problemas internacionales, regionales y nacionales se solucionan localmente. Es un desarrollo con una visión integral, en el que intervienen tres elementos de igual importancia entre sí, que son: Ambiente, Economía y Sociedad.
La relación que tienen los tres elementos es de carácter dinámico. Se debe recordar que la Sociedad depende de la Economía y la Economía depende del Ambiente. Por lo tanto, si contamos con un Ambiente sano y pleno de recursos naturales puede existir una Economía viable y con ella, una Sociedad justa.

 El concepto de sustentabilidad promueve una nueva alianza naturaleza-cultura fundando una nueva economía, reorientando los potenciales de la ciencia y la tecnología, y construyendo una nueva cultura política fundada en una ética de la sustentabilidad –en valores, creencias, sentimientos y saberes– que renuevan los sentidos existenciales, los mundos de vida y las formas de habitar el planeta Tierra.
La aparición y difusión del término desarrollo sostenible o sustentable ha acompañado al proceso de concientización ambiental de la sociedad global. 
Inicialmente este concepto se relacionaba –aún con contradicciones-, con el crecimiento económico, pues no se consideraba en profundidad los objetivos de mantenimiento de las bases naturales del ambiente y los procesos de deterioro de los recursos naturales en las distintas escalas geográficas.
Recién hacia finales de los años sesenta y principios de los setenta que la crisis ambiental planetaria comienza a tener consideración en los foros mundiales tanto gubernamentales como no gubernamentales.
El debate medio ambiente – desarrollo, suscitado en esos momentos-, reveló que los problemas ambientales se manifiestan de manera distinta según se trate de países desarrollados o de países en desarrollo. A grandes rasgos es posible señalar que los primeros sobre utilizan los recursos naturales, mientras los segundos los subutilizan; si bien en la actual era de la globalización, además, los países desarrollados sobre utilizan los recursos del resto de los países a través de la apertura del comercio internacional y el deterioro de los términos de intercambio y el peso impuesto por las deudas externas. En definitiva, los países desarrollados han sido los focos originarios de los problemas ambientales que se “exportaron” a las áreas de concentración urbano-industrial de los países en desarrollo.

Consumismo ,marcas (mercadotecnia) y sustentabilidad


La Mercadotecnia Sustentable surge durante la década de los noventas como respuesta a la conciencia mundial sobre temas de deterioro ecológico. Shethb y Parvatiyar (1995) son los primeros en utilizar el concepto definiéndolo como una nueva forma de mercadotecnia que busca equilibrar los intereses de la empresa y del consumidor con los intereses de la ecología y el desarrollo sustentable. Fuller (1999) amplió esta definición: 


"Consiste en el proceso de planear, implementar y controlar el desarrollo del precio, la promoción y la distribución de productos de manera que satisfaga las necesidades del consumidor y los objetivos de la organización y al mismo tiempo el proceso sea compatible con el medio ambiente".


Otros términos que se han utilizado para referirse al mismo concepto son: Mercadotecnia Verde (Ottman, 1993; Peattie, 1992), Mercadotecnia Ambiental (Coddington, 1993) y Mercadotecnia Ecológica (Henion, 1976).
Cabe mencionar que algunos expertos han coincidido en que quienes siguen esta nueva tendencia de la mercadotecnia tratan de solucionar los problemas de los que son responsables. Pues la mercadotecnia tradicional es responsable en gran medida del deterioro del medio ambiente, el abuso de los recursos naturales y la desigualdad social.
¿Cómo se materializa el concepto?
La Mercadotecnia Verde es definida por muchos como el desarrollo y promoción de productos y empaques que contienen componentes biodegradables que protegen el medio ambiente. Pero esta nueva tendencia va mucho más allá. La Mercadotecnia Sustentable promueve la modificación de todo el ciclo del producto para involucrar la responsabilidad ecológica en cada parte del proceso.
Esto significa que las empresas deben afrontar su responsabilidad en el ciclo de vida del producto fabricando productos eco-eficientes, es decir, que duren más tiempo, que se produzcan con la menor cantidad de recursos posibles y que incluyan material reciclado cada vez que sea posible. Esto debe cuidarse durante todo el proceso, desde las materias primas, el proceso de producción y el producto final.
  Consumidor y empresario ecológico
La Mercadotecnia sustentable, requiere de conciencia por parte de sus integrantes, se genera un nuevo tipo de consumidor que trae consigo la conciencia por el entorno, además de estar preocupado por satisfacer sus necesidades actuales, piensa en las necesidades en corto o mediano plazo, es el consumidor ecológico, que es definido como:
Personas conscientes de cómo sus decisiones día a día pueden influir en un crecimiento respetuoso con el medio ambiente.
“Este tipo de consumidor no se define por sus hábitos de consumo sino por su interés en los problemas ambientales, de forma que incorpora la variable ecológica en la elección del producto. En la medida que la oferta se lo permite, compra productos que, etiquetados como ‘verdes’,  causan menos daño al medio natural. En concreto, evita los productos que supongan peligros para la salud, que causen perjuicios en la fase de producción o distribución, que contengan ingredientes procedentes de especies en peligro de extinción."
Este consumidor modifica su perfil y los empresarios tendrán que adecuar sus productos para satisfacer sus demandas, se contextualiza en la llamada mercadotecnia social, lo que permite la relación con la responsabilidad social del empresario, es ver más allá de sus propias metas, lo que redundará en mejoramiento de su imagen y en beneficios para sus clientes, para darles lo que están buscando.
“La mercadotecnia ecológica está cambiando a raíz de una necesidad: las empresas se ven obligadas a adaptarse a las demandas ecológicas de sus mercados y de los organismos que regulan sus actividades contaminantes”.
El campo de acción de la empresa sustentable es amplio, va desde evitar la contaminación en todos los sentidos, propagandístico y en sus procesos de elaboración, la ejecución de una mercadotecnia sustentable y su participación en la toma de conciencia del entorno por parte de sus clientes.

Educación para el consumismo (reciclaje)


La educación para el consumo es uno de los ejes transversales obligatorios que los centros educativos de nuestro país deben trabajar de forma complementaria en las diferentes áreas curriculares. Fomentar una actitud crítica hacia el consumo, aprender a planificar el uso eficaz del dinero o conocer sus derechos y deberes como consumidores son algunas de las competencias básicas que pueden adquirir los estudiantes en este ámbito.

La educación del consumidor es uno de los objetivos declarados por la Unión Europea para que la evolución del espacio común se desarrolle en un área económica sostenible y próspera. Esta formación es aplicable a todos los ciudadanos, pero en especial a los más jóvenes, las nuevas generaciones, que serán los consumidores del futuro más cercano.
Por este motivo, la educación reglada incorpora ya estos contenidos de forma obligatoria, tal como dictan la Ley Orgánica de Educación (LOE 2006) y los Reales Decretos que establecen las enseñanzas comunes de las distintas etapas. Junto con la educación ambiental, la educación vial o la educación sexual, entre otras, la educación del consumidor se integra en el currículum con carácter transversal, es decir, se debe trabajar como complemento en las actividades de enseñanza y aprendizaje y debe impregnar todas las actuaciones del centro educativo.
Educación del consumidor en la Unión Europea
La educación del consumidor es uno de los objetivos declarados de la Unión Europea . Los estrategas políticos de la Unión Europea están convencidos de que es indispensable aplicar medidas de educación del consumidor bien estructuradas tanto a nivel nacional como a través de redes internacionales. Ello queda bien reflejado en varios números de documentos centrales (Agenda 21, Informe Brundtland, Carta de Derechos Básicos 2000...)
Los objetivos de la UE establecen que la UE tiene que desarrollarse en un área económica sostenible y próspera. No obstante, esto sólo se puede conseguir si la calidad y las bases de la vida de los ciudadanos europeos, que dependen del consumo, no se destruyen debido a una excesiva demanda de consumo al mismo tiempo.
Todos los estados miembros de la UE están interesados en garantizar una educación básica adecuada en temas relacionados con el consumo par todos sus ciudadanos, y ello, por razones sociopolíticas y económicas. Es la base de un equilibrio justo entre proveedor y cliente en los aspectos de la información al consumidor. Los ciudadanos serán más conscientes de su papel como actores en el sistema económico y desarrollarán las competencias adecuadas para poder evitar o al menos reducir las desventajas de los consumidores derivadas de una falta de conocimientos.
Educación del consumidor en artículos/literatura científica
El término consumo describe el uso de bienes y servicios para la inmediata satisfacción de necesidades, el término uso, utilización hace referencia a "agotar" y usar los bienes. "Consumir" también incluye el acto individual del consumo.
La Educación del consumidor nunca ha sido polémica como componente de la educación económica general. La actual educación del consumidor es un nuevo concepto: permite la autordeterminación individual y permite asumir la responsabilidad social.
La Educación del consumidor es necesaria para sobrevivir en la sociedad de consumo y está directamente relacionada con las habilidades necesarias para dirigir la vida cotidiana.
Muchas personas no sólo no son conscientes de su propio comportamiento de consumo, sino que tampoco saben como y en qué medida pueden influir en la economía, el medio ambiente y la sociedad a través de su comportamiento de consumo. Han dejado de ser capaces de participar activamente en el mercado.
Algunas definiciones de Educación del consumidor:
La Educación del consumidor son medidas para informar al consumidor, que es visto como necesitado de protección, sobre el funcionamiento de la economía de mercado, los productos y servicios, las razones del comportamiento de consumo, las fuentes de información, el comportamiento que coincide con sus intereses, y formar en los comportamientos básicos necesarios para respetar los intereses de consumo individuales y/o colectivos.
La Educación del consumidor hace referencia a las habilidades, actitudes y conocimientos requeridos para vivir en una sociedad de consumo.
Por Educación del consumidor entendemos todas las medidas tomadas que sirven como información sobre los contenidos relevantes para el consumidor y la formación en los roles del consumidor.
Con Educación del consumidor queremos decir aquellas medidas educativas que transmiten conocimientos relevantes para el consumidor a través de temas planificados sistemáticamente en una instrucción principalmente orientada a la acción, en la que se adquieren habilidades básicas y se valoran actitudes y valores. Si se considera necesario, se inician cambios en el comportamiento hacia un estilo de vida sostenible.
La Educación del consumidor no se debe imponer a los consumidores, no hay que expresar prohibiciones y órdenes. No se debe entender como un incentivo para comprar más, ni tampoco como una ayuda para decidir qué producto comprar; ¡la Educación del consumidor no es una guía para dejar de comprar!
La Educación del consumidor es un componente fundamental de la educación general, que debe ayudar a los consumidores en su intento de organizar su vida diaria de una forma sostenible y utilizar de forma responsable los recursos disponibles.
Para la Educación del consumidor ello significa que:
·         1. los consumidores individuales deben tener conocimientos sobre los bienes y servicios de consumo,
·         2. los consumidores deben tener una idea básica sobre los valores relativos al consumo y la medición de valor, y
·         3. los consumidores tienen que ser consciente de la función social del consumo, y tener conocimientos básicos del rol dependiente del consumidor y las conexiones sociales entre la economía y el consumo.
No obstante, los aspectos mencionados más arriba no son suficientes. La conciencia de los propios valores, la reflexión sobre el propio comportamiento de consumo y los conocimientos obtenidos deben dar lugar a cambios en el comportamiento de consumo.